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Croacia en 10 días (parte IV)

  • Foto del escritor: Laura Martín Pérez
    Laura Martín Pérez
  • 25 feb 2018
  • 4 Min. de lectura

Hacía tiempo que pensaba en Croacia y nunca me decidía a ir, generalmente por los altos precios, tanto de los vuelos como del alojamiento. Y, entonces, una familia de aquí, del pueblo, me dicen que este año se van de vacaciones a ¡Croacia! Y claro, evidentemente, no podía desaprovechar la ocasión.

El año pasado se fueron a Rumanía y estuve a punto de irme con ellos, pero al final me fui con unos amigos a Grecia. Pues bien, esta vez no iba a dejarlo pasar.

DÍA 4: Brac

Cuarto día en este precioso país y nos vamos a la Isla de Brac. Nuestra idea inicial era hacer Brac y Hvar en un día, pero viendo los horarios de ferry y lo que tardaban decidimos que teníamos que escoger una de las dos islas y disfrutarla más, que no ir corriendo de ferry en ferry.

Salimos del apartamento sobre las 8 y cogimos el ferry de las 9. Mirar siempre los horarios del ferry porque pasan cada hora u hora y media y siempre hay mucha cola para comprar los tíquets. Si ya lleváis varios días en Split, lo mejor es comprar los tiquets el día antes o ir a primera hora, aunque queráis coger un ferry posterior. Nosotros lo compramos el mismo día y conseguimos llegar a tiempo porque habíamos salido muy temprano del apartamento, pero un par de personas más en la cola y quizás nos teníamos que esperar una hora para el siguiente.

Finalmente, conseguimos coger el ferry de las 9 y llegamos a Supetar sobre las 10 que, entre que salimos y aparcamos, se nos hicieron las 10 y media.

El lugar más famoso de la isla de Brac es Zlati Rat, en el pueblo de Bol, pero pensamos que a esa hora ya habría muchos ferrys y excursiones organizadas que habrían llegado así que decidimos ir a la playa por la tarde, cuando bajara un poco el sol, con la esperanza de que estuviera más vacía.

Así pues, empezamos nuestra ruta por la isla visitando el pueblo de Supetar, el mismo sitio donde te deja el ferry. Si vais andando, el ferry os dejará muy cerca del centro del pueblo, así que no os preocupéis por ir andando que en menos de 5-10 minutos máximo estáis allí. Nosotros fuimos en coche así que tuvimos que buscar aparcamiento, pero dejándolo un poco a las afueras no fue difícil.

Y sobre las 10:30-11 ya estábamos paseando por Supetar. No seguimos ninguna ruta en concreto, simplemente paseamos por el pueblo, visitamos la iglesia y disfrutamos de sus callecitas antiguas. Es un pueblo pequeño así que en menos de una hora ya lo habréis paseando prácticamente todo.

Sobre las 11:30 cogimos de nuevo el coche para dirigirnos a Skrip, un pueblo muy muy muy pequeño y realmente antiguo. ¡Había más castillos que casas! Bueno, quizás lo he exagerado un poco, pero no tanto. El pueblo se pasea en 15-30 minutos y es realmente alucinante como en tan poco espacio puede haber una iglesia, dos castillos y un cementerio; y claro, no quedaba sitio para las casas. Realmente, por lo que parecía apenas vivía nadie allí; quizás habría unas 5 casas. La verdad es que fue un descubrimiento curioso y que, si vais en coche, creo que vale la pena acercarse a verlo.

Sobre las 12:30 cogimos de nuevo el coche para dirigirnos a Nerezisca, un pueblo mucho más grande que Skrip. Como de costumbre, aparcamos un poco alejados del centro histórico, y luego subimos andando por unos cuantos escalones hasta llegar a la iglesia del pueblo. Dimos una vuelta por la zona y empezamos a bajar de nuevo, disfrutando de las callejuelas y casitas antiguas típicas de la isla.

Ya era la una pasadas y teníamos hambre, así que cogimos el coche y empezamos a buscar alguna playa con sombra donde pudiéramos sentarnos a comer. Y, entonces, cuando ya estábamos bastante cerca de Bol, paramos en un mirador a ver la famosa playa de Zlati Rat; y desde allí vimos una playa preciosa al lado de un monasterio y decidimos que ése era el lugar perfecto.

Hicimos varias fotos y nos subimos de nuevo al coche para dirigirnos al monasterio, donde aparcamos sin ningún problema y ¡¡en la sombra!! Nos sentamos en una sombrita e hicimos bocadillos con el pan y embutido que llevábamos. Una vez acabados de comer paseamos por las dos playas que había a lado y lado del monasterio (aunque desde el mirador solo se veía una), y nos tumbamos en la más chiquita para disfrutar de un rato de relax. Estuvimos un par de horas en la playa y de nuevo al coche para ir, ahora sí, a Bol.

Un detalle a tener en cuanta si viajáis a Croacia es que casi todas las playas, por no decir todas, son de piedra, por lo que necesitaréis zapatos adecuados para meteros en el agua.

Sobre las 16:30 llegábamos a Bol, donde aparcamos en un párquing gratuito a las afueras del pueblo, que quedaba en un lugar intermedio entre el pueblo y la playa, de forma que podíamos llegar sin andar mucho a ambos sitios. Decidimos visitar primero el pueblo y apurar lo que pudiéramos para que los turistas se fueran de la playa.

Bol es un pueblo precioso que vale la pena pasear y perderse por sus callecitas. Es más grande que Supetar y podéis dedicarle una hora entera a pasearlo y disfrutarlo como se merece.

Finalmente, sobre las 17:30-18 empezamos a ir hacia la playa, paseando por el paseo marítimo y encontrando miniplayas preciosas. Si tenéis más tiempo, yo os recomiendo parar en alguna de esas playas y no ir solo a LA PLAYA, ya que hay muchísimas que son preciosas. Nosotros no teníamos más tiempo así que fuimos directos a Zlati Rat.

Y la verdad es que la playa no nos decepcionó. A ver, es cierto que no es como en las fotos, ya que siempre hay gente y hay muchas tumbonas que estropean las vistas; pero la playa es preciosa y el agua no estaba tan fría, o al menos eso nos pareció, como otras playas de Croacia. Además, pudimos ver como el sol empezaba a ponerse y el cielo se ponía de colores preciosos.

Y sobre las 7 de la tarde cogimos el coche que teníamos que volver a Supertar a coger el ferry de las 8 para volver a Split.

Continuará...

 
 
 
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Mi nombre es Laura y tengo 22 años...

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